¿Qué es?

Nuestra piel sufre un envejecimiento cronológico natural con una disminución de la producción de colágeno y evidencia del exceso de la exposición solar (envejecimiento ambiental).

El tratamiento de fotorejuvenecimiento ayuda a mantener un aspecto joven, terso y luminoso, tratando las alteraciones causadas por el sol, eliminando manchas cutáneas, lentigos solares o seniles, rojeces faciales, etc.

Aplicaciones

Las manchas solares contienen melanina y las rojeces difusas hemoglobina. Cuando las células que contienen estos componentes reciben esta luz se calientan y se eliminan, consiguiendo que la alteración epidérmica no sea tan perceptible o desaparezca.

Al ser un tratamiento basado en la absorción de la luz, son más eficaces en pieles claras y sin broncear en el momento del tratamiento.

La tolerancia al dolor es muy variable. La mayoría de los pacientes lo describe como una sensación de calor y no es necesaria la anestesia.

Indicaciones

Zonas: rostro, cuello, escote y dorso de las manos.
Sesiones: entre 1-3 sesiones separadas de 1 mes, según cada caso.
Duración del tratamiento: 30 minutos.
Dolor: leves molestias.
Recuperación: al cabo de 3-5 días.
Visibilidad de mejoría: al cabo de 1 semana.
Época del año recomendada: de Octubre a Mayo.
Tratamientos combinables: todos los tratamientos faciales.
Consejos: se recomienda el uso de geles hidratantes y el uso de cremas de protección solar (mínimo SFP 50+)